Mi opinión es que una persona en tu situación debería preocuparse poco o nada por su forma física y centrarse en solucionar el problema psicológico. Entre otras cosas, porque pienso que, en cuanto estés mejor psicológicamente, recuperarás lo que hayas perdido a nivel físico enseguida. Además, me da la sensación de que te estás agobiando con las posibles consecuencias de tu desregulación alimentaria y eso es una fuente adicional de ansiedad para ti.
Por la comida que has descrito, parece que comes alimentos sanos. Los atracones de dulces sí que son un problema, porque esos alimentos no son sanos. Sin embargo, teniendo en cuenta el infrapeso que tienes, puede que no tengas que preocuparte por eso tanto.
El problema principal es que me da la impresión de que haces una dieta que parece una montaña rusa; unos dietas un déficit de la leche y otros un superavit de la leche, lo uno para compensar lo otro. Deberías practicar el agomez style; deja de calcular calorias, déficits y superávits y simplemente intenta comer bien todos los días que puedas. Por comer bien quiero decir simplemente alimentarte de alimentos sanos en cantidades racionales.
Esos 52 kilos que mueves en sentadillas, teniendo en cuenta tu situación (infrapeso y desgaste psicológico significativos), los veo estupendos. Sigue entrenando e intentando progresar. Ya sabes que en esto lo importante no es donde estamos sino adonde vamos. Si vas progresando con las cargas llegarás a buen puerto. El ejercicio te vendrá muy bien para regular tu estado psicológico y mantener la ansiedad a raya, lo dice la ciencia y también lo dice mi experiencia (yo también estoy experimentando problemas psicológicos, aunque lo mío no es ansiedad, y noto que el entrenamiento me hace sentirme mucho mejor).
Respecto a los atracones de dulces, me supongo que hay poco que se pueda hacer porque cuando te los metes es porque estás en un estado de ansiedad incontrolada. El único consejo que se me ocurre es que, si no puedes evitar darte esos atracones, podrías intentar seleccionar dulces un poco más sanos (por ejemplo, si vas a comer chocolate, elegir uno más "puro", con mayor porcentaje de cacao, que es algo más sano). Por supuesto, si en vez de dulces pudieras saciar tu ansiedad con carne u otros alimentos que sean "comida de verdad" mucho mejor, pero me supongo que no será fácil.
Ten en cuenta que la ansiedad puede producir cambios de peso (tanto aumentos como pérdidas) psicosomáticos. O sea, que aún en ausencia de cambios en la dieta, la propia ansiedad puede producir cambios de peso. O sea, que si observas cambios, no se los atribuyas sistemáticamente a la alimentación porque, si bien la alimentación puede ser la responsable, los motivos también pueden ser puramente psicosomáticos. Esto también me hace reiterarme en que tu prioridad debe ser encontrarte mejor psicológicamente.
Puedes hablar de tus problemas con la comida con el psicoterapeuta o con el psiquiatra si es que visitas a uno. Puede que te sepan dar consejos sobre cómo regular tu hambre y recuperar los buenos hábitos.
A medida que te vayas recuperando de la ansiedad entrarás en un círculo virtuoso; te costará menos alimentarte bien, estarás mejor físicamente y te verás mejor estéticamente. El verte bien, a su vez, podría reducir tu ansiedad.
No eres el primero ni serás el último con este problema, hay mucha gente que pasa por tu situación y consigue salir de ella. Un abrazo y mucho ánimo.