8. Debes ‘Conmocionar’ a Tus Músculos y Tenerlos Adivinando:
Esta tiene que ser una de las oraciones más tontas y más faltas de inteligencia jamás hechas (sin resentimientos porque yo también solía pensar así). De manera interesante, la gente que solía darme este consejo debe haber estado conmocionando o engañando sus músculos de la manera incorrecta ¡porque no tenían masa muscular en sus cuerpos para respaldar esa declaración! Cree esto y nunca verás ninguna ganancia muscular en tu cuerpo. Si meditas sobre este mito el tiempo suficiente podrías comenzar a reírte. ¿Realmente crees que puedes cambiar tu rutina de ejercicios y entrenamiento para sorprender a tu cuerpo y obtener una reacción diferente de ellos?
Tus músculos no tienen ojos externos que te recompensen con crecimiento de nuevo músculo si los confundes. Tus músculos comprenden el MOVIMIENTO y eso es todo, empujar, jalar, flexionar, extender, contraer o liberar, esto es todo. Puedes estar levantando sacos de arena o un peso muerto de 400 libras y la acción sobre tu espalda será la misma, tus rodillas se doblan y tu tronco se flexiona. Así que, ¿Donde está la conmoción? Por qué razón los músculos de tu espalda dirían: “Santo cielo, estás haciendo levantamientos con una Barra olímpica y ya no con sacos de arena”. Mejor nos ponemos a acumular algo de músculo. O quizás puedas cambiar el orden de tu rutina atacando una parte débil del cuerpo dos veces a la semana. Si solo entrenas tus brazos una vez a la semana y luego estratégicamente los ejercitas dos veces a la semana entonces estos quedarán confundidos y conmocionados y comenzarán a crecer. ¡Por favor! Tus músculos operan en base a leyes científicas, no en leyes engañosas. Olvídate de la tontería de intentar ‘conmocionar’, ‘confundir’, ‘engañar’ y ‘mantener los músculos adivinando’. La única que cosa que quedará conmocionada y confundida es la persona que anda perdiendo el tiempo con los ejercicios y no tiene ninguna idea de por qué su cuerpo no ha cambiado en un mes desde que comenzó este programa de ‘mantener al cuerpo adivinado’. Recuerda que tus músculos no se conmocionan cuando cambias un ejercicio. Están diseñados para tolerarlo.
Fuente sacada de Culturismo sin tonterias de Vince Delmonte