Dale tiempo a tu cuerpo de descansar después del trabajo penoso del parto. Exigirle demasiado puede ser nocivo para tu salud – el cuerpo ideal, para ponerse otra vez el bikini puede esperar. Ahora necesitas toda tu energía para tu bebé, y sobre todo, no solamente para amamantar. Puedes empezar ya en el sobreparto con un poco de gimnasia ligera. Hay clínicas que ofrecen cursos especiales, a los que puedes acudir ya en el segundo día del parto o tu partera te puede indicar ejercicios adecuados. (Atención: si tuviste cesárea tendrás que esperar más tiempo para empezar con cualquier tipo de gimnasia)
Los músculos de la pelvis y del abdomen están muy estirados y debilitados después del parto. En algunas mujeres se puede sentir un espacio entre la piel del abdomen y los músculos de éste. Hasta que haya desparecido este espacio podrás empezar con sit-ups y ejercicios igual de agotadores. ¡Hay veces que hay que esperar hasta 4 meses! Por eso una de las metas principales del gimnasia de evolución regresiva es fortalecer los músculos de la pelvis, de manera que se cumpla la función de apoyo de los músculos y se evite que la matriz caiga.
Cuidado con ponerse metas muy difíciles
Si fuerzas los músculos del abdomen demasiado y muy pronto después del parto, aumenta la presión en la cavidad abdominal, la pelvis todavía no resistirá esta presión. Si te sientes bien y ya nada te molesta o duele y el nuevo bebé se ha integrado a tu vida cotidiana, de manera que puedas cumplir con tus citas, entonces ya te puedes inscribir a un curso de gimnasia de evolución regresiva. Esto deberá ser posible entre la 6. semana y a más tardar el 4. mes después del parto. Tu partera o ginecólogo (a) te pueden recomendar cursos apropiados. Algunos seguros pagan hasta 10 horas de estos cursos. Hay cursos a los que puedes asistir con tu hijo. No dudes en aprovechar la oportunidad si alguien de la familia se ofrece para cuidar tu bebé en lo que tú vas a un curso, pues así te podrás concentrar mejor y en toda tranquilidad podrás trabajar tus músculos de la pelvis.
Otras alternativas
También existe la gimnsia de evolución regresiva acuática. En el agua los ejercicios son menos penosos y hasta más efectivos. Si el agua está a 34-35 grados, se logrará un mayor grado de relajación. En este tipo de gimnasia no se aceptan bebés.
Si ya practicabas yoga durante el embarazo y dominas los ejercicios, puedes continuar después del parto sin ningún problema. La Yoga es ideal para relajarse y fortalecer los músculos. Si todavía no conoces la Yoga, te la recomiendo, pero un curso profesional y no un curso autodidáctico con ayuda de libros. Infórmate en la Asociación de Yoga de tu localidad.
También las mamás podemos ser bellas
